Tras una tregua del tiempo, el 25 de diciembre decidí hacer una excursión por las afueras.
Tras 10 minutos de viaje, me encontré un paraje con río, puente, embalse...¡hasta un cadáver!
Espero que os gusten las fotos.
Tras 10 minutos de viaje, me encontré un paraje con río, puente, embalse...¡hasta un cadáver!
Espero que os gusten las fotos.
Torrente en un río, que según deduzco, es el río Campanillas.
Curiosamente, al llegar a la desembocadura el río de estrecha, y no agranda.
Curiosamente, al llegar a la desembocadura el río de estrecha, y no agranda.
Buscando piedras para cruzar el río me encuentro con estos dos miriápodos.
Este puente ha vivido mejores tiempos.
Sobre él, la carretera, debajo, pasa el río.
Sobre él, la carretera, debajo, pasa el río.
Pasado el puente, tréboles.
No encontré ninguno de 4 hojas.
Última foto del río, ya llegando al embalso donde desemboca.
Podemos observar por el cauce, que ha tenido más caudal.
No encontré ninguno de 4 hojas.
Arbusto de ramas aromáticas.
El olor recordaba al anís y al clavo.
Debajo de este (aunque no se vea) la mandíbula inferior y la costilla de un perro.
El olor recordaba al anís y al clavo.
Debajo de este (aunque no se vea) la mandíbula inferior y la costilla de un perro.
Última foto del río, ya llegando al embalso donde desemboca.
Podemos observar por el cauce, que ha tenido más caudal.
Subiendo por una cuesta, me encuentro con una chumbera, y junto a esta, bayas.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
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